M 31
La más grande
del grupo local es la galaxia de Andrómeda, y por lo visto se nos viene encima.
Claro que esta expresión sería más acertada si fuésemos más longevos porque dista
de nosotros unos 2.500.000 años luz.
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| Andromeda diciembre 2015 |
Aún a tanta
distancia, es posible verla a simple vista en los cielos de otoño e invierno en
el hemisferio boreal. Aunque a ojo desnudo solo distinguiremos su parte central
más brillante. Con un instrumento de más de tres grados de campo, la visión es extraordinaria.
Con un telescopio puede uno recrearse en el detalle de los brazos espirales.
Podría parecer una paradoja de cómo los extraordinarios griegos con sus fábulas, con sus cuentos, mitos y tantas otras historias fueron engranando todo lo que la imaginación daba para en determinada lógica dejar constancia de lo que luego se fue situando en el universo local, en el cercano; ése que solemos ver o, más o menos, pensamos entender. Sólo que en vez de ser ella la devorada por aquel monstruo, es ella la que finalmente devorará a nuestra Láctea y existente vida en unos cuantos eones de tiempo. Pena de no verlo; esos choques que sin sentirlos, sin causas ni desconciertos fueran aproximándonos a cuantos cataclismos de luz y plasmas de color pudiéramos registrar con nuestros objetos futuros.
ResponderEliminarPara entonces o nosotros somos carne de pretérito imperfecto o estaremos viajando a miles de años en otros universos, incluso al incipiente pasado de éste, a uno de esos divertículos que entre distantes galaxias dio lugar éste, o si algo quedó de esta tierra alguna otra criatura evolutiva estaría disfrutando de ese acontecimiento, sentados como en un autocine, desde el anfiteatro de anillos de Saturno. Todo un ocaso digno de poner los pelos de punta de cualquier anfibio imberbe.
Las fotos, cómo siempre, de alucine; fantásticas es poco.
Deicaludos, más o menos d:]´
Una imagen muy bien resuelta y equilibrada! Me gusta mucho :)
ResponderEliminarGracias me alegra que os guste. Un saludo!
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